Trepar y trepar

Amenazaba con una rodada mortal el jueves pasado (aprovechando que era feriado por ser jueves santo)... y de cualquier manera, así fué. Llegué 10min tarde (para variar) a la cita en el kilómetro 8.5. Para mi sorpresa solo estaban Abraham y Arturo. "Creo que vamos a ser los únicos...". En lo que me ponía mi indumentaria y preparaba mi corcel llegaron Jimmy y Fer. Originalmente el plan era hacer Torre 3 vía Mosca -> Toboganes -> Obsidianas -> Río Seco. Pero después de una breve deliberación quedamos en ir hacia Tala.

El ascenso a la Mosca fué más leve que la vez anterior ya que en esa ocasión veníamos de subir a Torre 1. De cualquier manera, resulta exigente. Esta vez no me fué posible superar los escalones a medio tobogán, fué necesario aplicar "la tapatía". Terminamos Toboganes sin contratiempos y nos tomamos un "break". Y a subir hacia Obsidianas. Jimmy mostraba ya signos de fatiga debido a un mes sin rodar y a una gripa reciente. Si hay alguien celosa, ésa es la bicicleta. Lo bueno es que por delante quedaba el descenso hasta el Río Seco; aún así hay que llevársela tranquila so-pena de un codo zafado como le pasó a Marce.

Llegando al Río es un tramo de unos 5-6mts de arena suelta, y al intentar cruzarlo pierdo tracción, no puedo zafar el pie del pedal y ¡bajan! Jajajaja, una caída de esas bien torpes pero en blandito, así que sin consecuencias. Tomamos la vereda hacia Tala, y después de un singletrack que hacía muuuucho tiempo no recorría, subimos a pie por un paso entre piedras y decidimos deternos enseguida para esperar a Abraham y Jimmy. Ellos comentan sobre emprender el retorno, yo veo el reloj y decido unirme a esa convocatoria, por lo que todos decidimos regresar, después del respectivo lonche. Para esta hora el sol ya estaba surtiendo efecto y el calor se dejaba sentir. Llegamos nuevamente al cruce con el Río Seco y... a subir se ha dicho. Al principio seguí el ritmo de Fer pero no tardó en adelantarse y dejarme solo. Definitivamente trae mucha pierna para el ascenso. Yo ya venía algo cansado así que a echar mano del payasito. A mitad del camino volví la cabeza y nada... seguia solo. A seguir pedaleando para no perder el ritmo. Aún cuando es un ascenso fuerte (400 mts verticales) pude hacerlo en menos de una hora, unos 5-10min detrás de Fer. En la parte más alta esperamos a Abraham y enseguida aparecieron Arturo acompañando a Jimmy quien ya había dado lo que tenía que dar.

Un último "break" y a seguir pedaleando con rumbo al 8 y medio, donde nos esperaba una coca de medio litro bien fría... aaahhh, el solo imaginarla daba la motivación suficiente para seguir moviendo las piernas. Fer llegó primero y fué el encargado de recibirnos con el preciado líquido. Un buen premio al esfuerzo realizado.















Como colofón a esta rodada, al estar empacando mis cosas en el auto se me acerca un ciclista... ¡es Mario Zuani! Tenía un buen rato de no verlo, desde que salió de Solectron. Platicamos un rato y cada quien seguimos nuestro camino. Es agradable reencontrarse con los amigos.

Así fué...