20 de julio de 2009

Lo más pesado hasta ahora


Ahora sí que sentí el rigor de la rodada hacia Amatlán de Cañas. Aparte de que le agregué 21Km más al inicio (empecé de Magdalena en vez de Etzatlán) ya no traigo el triple adelante. Y vaya que lo extrañé en el ascenso de regreso. Subí los 12Km de Pie de la Cuesta a La Yerbabuena en el mismo tiempo que el año pasado (70 min Aprox.) pero sentí como el doble de esfuerzo en las piernas. Casi desde el inicio de la pendiente fué un tremendo debate interno entre detenerme ó continuar. Es un juego mental muy maniaco. Pude sobreponerme y al pasito pero subí.

Como siempre un calor muy sabroso, 32 grados bien soleados. Hacía viento y esto refrescaba un poco, pero al final resultó contraproducente: de San Marcos a Etzatlán todo el aire en contra. Apenas a 20 Km/Hr. Como pude llegué y de inmediato a la tienda a buscar algo para recuperarme. Afortunadamente tenían Electrolit bien frío... aaahhh, qué alivio.

Espero que para la próxima el sujetillo Samir no me deje morir solo y ahora sí poder completar el trayecto hasta Magdalena de regreso. Los dejo con las fotos del recorrido:

El corcel listo para arrancar



¡Qué ruedotas!






Sombras nada más...







Un nuevo letrero en lo más alto








A veces, lo barato sale caro


Sí, así se llama el poblado, "Puerta del Coche"


Así fué...

7 de julio de 2009

Vaya desilusión


Poco más de 3 años sin ir al Cerro del Huehuentón, así que cuando sugirieron esta ruta luego luego me apunté. Nos vimos en casa de Luis Miguel, enfrente del Funeral Colonias. Nos trepamos a las camionetas con todo y bicis y agarramos rumbo a Ameca. Un día nublado con lluvia a ratos.

Ya en Ameca, desviación a Quila, a donde llegamos después de unos 50min de terracería. Casi todos con impermeables; yo dudaba porque sé que sudo mucho y llevar una chamarra encima, aunque sea ligera, es como un mini-sauna. No, mejor aguanto la lluvia. Creo que fué una decisión acertada, en realidad nunca nos llovió fuerte e incluso a ratos salió el sol.



Pronto la primera subida; no es un tramo largo pero sí está empinado. Los primeros 200 mts. me hice el valiente y usé el plato de enmedio, pero enseguida recurrí al payasito... apenas íbamos empezando. Pasando el kilómetro 10 otra buena subida, algo más empinada. Aqui sí nada de heroísmos, 22-34 y aún así se sentía el rigor. Eso sí, el paisaje precioso, el bosque verde y el ambiente fresco por la lluvia. Ya nomás por esto vale la pena hacer el esfuerzo del recorrido. Luego vino una bajada que, aunque no era muy pronunciada y era en camino ancho, había que tener mucha precaución por lo resbaloso del terreno. Llegamos el sujetillo y yo a una intersección y esperamos a los demás mientras tomabamos un poco de sol aprovechando que se asomó.

Por eso sube como sube el sujetillo, chéquense el "honguito" que se botaneó





Nos reagrupamos y ahí vamos hacia la subida al Huehuentón. Llegando al crucero hacemos una pequeña pausa como para agarrar aire y entonces la pregunta "¿quien se anima?". Luis Miguel de plano responde "yo no subo, aquí los espero, y la carrilla me anda valiendo m...". 'Ta bien pues, si no quieres subir no subas y ya. Los demás nos hacemos los valientes y ahí vamos. Una subida corta (1.9 Km) pero muy pesada (12.5% de pendiente). Aparte, el terreno resbaloso. Hay que escoger muy bien por dónde pasar para que las ruedas no patinen, cosa que le sucedió a Samir un par de ocasiones... gracias a eso lo pude alcanzar. En fin, poco a poco fuimos llegando a la cima, donde algunos decidimos dejar las bicis y caminar hasta la parte más alta, donde ingerimos el respectivo lunch.


Aaahhhh, qué diferente se siente de bajada... reunión en el crucero y continuamos el recorrido. Puro bajar hasta el camino que va de regreso a Quila. Aquí viene un tramo de empedrado y subida, poca pendiente pero constante. Una pausa para auxiliar a Samir con una ponchadura y continuamos.


Esta parte se me hizo algo pesada ya que son algunos kilómetros y ya se trae el esfuerzo de la subida al Huehuentón en las piernas. Nos reagrupamos en una desviación para ir a visitar el árbol de la lira, un árbol de forma singular gracias a una bifurcación en su tronco que asemeja la forma de una lira, precisamente. Fotos y vámonos ya para terminar.




Justo antes de la parte final Luis Miguel sugiere una pequeña desviación para visitar "La Presa del Ahogado". Llegamos al lugar y ahí están unos tipos en unas cuatrimotos que acaban de llegar... nosotros todos hambreados, con apenas unos tragos de agua y ya sin alimento y los cuatrimoteros empiezan a sacar el pisto, la carne para asar y hasta el iPod con música ambiental. Entonces nos preguntamos "¿qué estamos haciéndole al cuento en las bicicletas? ¡Estamos en el deporte equivocado!". Ah, pero ahorita llegando a Quila me desquito con una chela bien fría... ¡JA! Una vez terminada la ruta y mientras cambiábamos de atuendo y se subían las biclas a las camionetas, Luis Miguel y yo vamos a la tiendita, vemos los refrigeradores llenos de cerveza sudada, en su punto peeeeeero... ¡oh sorpresa! Es ley seca; no nos pueden vender. Me lleva la #%&@... ¿tanto rodar para esto?

Y así, con esa frustración tuve que regresar a Guadalajara. Ni siquiera el Hershey's pudo levantarme el ánimo.


Así fué...